El plasma rico en plaquetas (PRP) es un producto biológico con propiedades regenerativas que se emplea en diversas especialidades médicas como traumatología, odontología y dermatología, entre otras. Tradicionalmente, el PRP se obtiene mediante centrifugación, lo que resulta en un plasma con niveles elevados de plaquetas y sus componentes en comparación con los niveles basales. Sin embargo, este método no permite un enriquecimiento uniforme de todas las biomoléculas presentes fuera de las plaquetas.

Recientemente, se han desarrollado sistemas alternativos de recolección basados en métodos como filtración, sedimentación, ultrasonidos, microfluídica y absorción de agua. Estos nuevos enfoques suelen ofrecer una recolección más eficiente en términos de velocidad y grado de enriquecimiento. Además, algunos de estos sistemas facilitan el enriquecimiento de componentes extraplaquetarios, lo que puede ser una ventaja significativa. Esto se debe a que factores extraplaquetarios, como el IGF-1  y el HGF, han demostrado jugar un papel crucial en la capacidad regenerativa del PRP.

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